Nosotros nos inclinamos por enseñarte como hacerlo con un maravilloso y poco conocido pimentero de montaña (Drimys lanceolata).
El hoyo. El hoyo debe ser holgado y en él debe caber al menos cepellón y medio del ejemplar a plantar. Aprovechar esta labor para eliminar las piedras y escombros que aparezcan en el subsuelo.
Abonar la tierra. Mezclar la tierra extraída con una cantidad igual de sustrato nuevo y orgánico. Recurrir a la mezcla Universal Desinfectada, que es la más común y se puede encontrar con facilidad en el comercio. Tapar con ella las raíces.
Afirmar el suelo. Una vez plantado el arbusto, hay que apretar el suelo alrededor de sus raíces para ponerlas en contacto con el medio. Para ello, bastará una leve presión con los pies.
Acolchar. Esparcir compost, que puede ser del hecho en casa o doméstico, sobre el suelo de las inmediaciones del nuevo ejemplar del jardín, para que evite la emergencia de malas hierbas y la evaporación del agua de riego.
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